Vacaciones en España y expertos internacionales
Uno de los aportes más llamativos fue uno de los realizados por el Gobierno español: llevar hasta España, en un periodo de seis meses en vacaciones a mil quinientos niños damnificados por el terremoto. Para esto, el país ibérico anunció el envío de un buque-hospital a Chile.

Otro foco importante de ayuda internacional se concentró en los aportes técnicos y profesionales, materializados en el envío de expertos. La misión más grande en este ámbito fue la alemana, pero también destaca la puesta a disposición por Francia del ingeniero Paul Clos, quien participó en la exitosa reconstrucción de la también terremoteada Agadir, en Marruecos, y de algunas ciudades iraníes. Holanda, por su parte, ofreció la colaboración de dos asesores expertos en telecomunicaciones, y México envió una Comisión de Ingenieros Sismológicos y de Mecánica de Suelos, encabezada por el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Dr. Nabor Carrillo.

Japón envió a Ryutaro Takahashi, Hajime Umemura y Takeo Watanabe, profesores de la Universidad de Tokio, quienes realizaron un informe técnico tras visitar la zona afectada. A esta ayuda se debe agregar la donación de tres equipos observatorios sismológicos, por un valor de aproximadamente US$10 mil.

El Gobierno de Israel, asimismo, ofreció becas para preparar chilenos en su país en temas relacionados a reconstrucción, lo que se suma a un ofrecimiento de asistencia técnica.