El tsunami, los moais y un empresario japonés
Ahu Tongariki es la plataforma ceremonial más grande de Rapa Nui y una de sus principales atracciones turísticas. En mayo de 1960, producto de la fuerza del tsunami, sufrió la pérdida y daño de varios moais. Diversas estimaciones y cálculos indican que una pared de agua, de más de ocho metros de altura, llegó a Rapa Nui y entró en la bahía baja de Hanga Nui y las tierras bajas circundantes hasta la base del volcán Rano Raraku. Impactó frontalmente el muro de cuatro metros de altura hacia el mar del monumento, destruyendo por completo la plataforma principal hasta sus cimientos y extendiendo los restos sobre un área de más de cuatro hectáreas.

Tres décadas más tarde, se comenzó a implementar en Ahu Tongariki un proyecto de restauración para levantar nuevamente los moais, trabajo dirigido por el arqueólogo Claudio Cristino, gracias al apoyo de la empresa nipona Tadano LTD., que suscribió un acuerdo con el Gobierno de Chile y la Universidad de Chile.

La compañía es la mayor fabricante de grúas y plataformas de trabajo aéreo de Japón y la séptima fabricante de grúas a nivel mundial. Su dueño provenía de un poblado que en 1960 resultó arrasado por el tsunami de 1960.

Por su aporte, que consideró una donación de dos millones y medio de dólares y maquinaria, en 2010 Koichi Tadano, Presidente y CEO de Tadano LTD., recibió de parte del Gobierno de Chile el diploma y las insignias de la Orden Bernardo O’Higgins, en grado de Gran Oficial.